La gigantesca red social está preparando sus planes para celebrar otra cifra récord: llegar a los 500 millones de usuarios, un hito al que esperan llegar antes de que termine el próximo mes de junio. Ya se está descorchando la champaña, y con razón.
El ritmo de crecimiento de la red social es asombroso, y aunque parece que poco a poco dicho crecimiento se va frenando lentamente -cada vez quedan menos internautas a los que atraer a esta red- lo cierto es que su base de usuarios ya resulta sencillamente dantesca.
Aunque como dicen en All Facebook la empresa no suele celebrar este tipo de logros, llegar a los 500 millones de usuarios parece ser un hito demasiado importante para desperdiciarlo, y puede que la empresa esté organizando un evento especial que además podría coincidir con el tercer aniversario de la plataforma Facebook, que tendrá lugar en las próximas semanas.
BitDefender advierte que el robo de imágenes y postales electrónicas parece ser una tendencia creciente entre los ciberdelincuentes, tal y como demostró el caso de una postal navideña de una familia estadounidense robada y usada con fines comerciales.
“Las imágenes son robados en línea por muchas razones, pero sobre todo con fines de lucro“, apunta Catalin Cosoi, BitDefender Senior Researcher. “Usando imágenes robadas de sitios como Facebook, se evitan pagar los cánones habituales por el uso de fotografías con derechos de autor, por ejemplo. Otras razones son la creación de identidades falsas o dar mayor credibilidad a ataques de phishing y spam“.
Entre todas las redes sociales, Facebook destaca por su gran número de usuarios. Precisamente, el no proteger adecuadamente a esa gran cantidad de personas, asegurándoles una adecuada política de privacidad es uno de los aspectos que más se critica de la red social, algo que también se aplica a las imágenes.
Técnicamente la política de Facebook abre la puerta a un aprovechamiento no restringido / no castigado de la identidad visual como revela el uso abusivo de imágenes de usuarios de Facebook utilizadas en campañas promocionales.
Para preservar la imagen y la identidad, BitDefender ofrece los siguientes consejos:
Evitar subir fotografías: Es una medida drástica, pero es la mejor manera de asegurarse que ninguna imagen va a ser robada.
Chequear las opciones de privacidad: Facebook y otras redes sociales ofrecen varias opciones para restringir el acceso al contenido publicado, incluyendo las fotografías subidas.
Insertar una marca de agua: Otro método de proteger una imagen visual es insertar en las fotografías una marca de agua digital, como un nombre o un logo. Aunque estropea un poco la imagen, puede ser suficiente para disuadir a un ladrón de imágenes.
Usar imágenes de baja calidad y poco tamaño: Subir las imágenes a una resolución de 72 dpi y no exceder el tamaño de 640 x 480 pixeles. Esto frenará a muchos ladrones, ya que esas imágenes no son válidas para carteles, publicidades, etc.
No publicar imágenes individuales o retratos: Las fotos de las personas (tanto adultos como niños) tienen más probabilidades de ser utilizadas con fines comerciales sin el consentimiento de sus dueños que fotos de grupos.
Facebook anunció ayer que comenzará en breve a compartir la información de los usuarios que resulte relevante para terceros. Permitirá en resumidas cuentas que cualquier socio previamente aprobado por Facebook disponga de información personal y relevante del usuario sin utilizar la herramienta “Facebook Connect“.
Anteriormente, era necesaria una aprobación del usuario para conectar la web conFacebook e interactuar de manera más efectiva con los contactos. Facebook tiene actualmente más de 400 millones de usuarios.
Según informó Facebook … “Un paso más en la regulación abierta del site” y “aprobadas por Facebook para ofrecer una experiencia más personalizada” “No poseemos ni manejamos las aplicaciones y webs con los que los usuarios interactúan a través de Facebook“.
Cuando se visiten determinadas web asociadas, el usuario podrá ver una publicidad más personaliza, sobretodo los usuarios que decidiesen por gusto o ignorancia compartir con todos (opción por defecto para nuevos usuarios) mediante las “cookies” del navegador y donde se pueden incluir los nombres, fotos de perfil, género, ID del usuarios, páginas y grupos.
Las quejas ya han empezando a generalizarse entre multitud de sectores encabezados por populares medios como Financial Times o TechCrunch y ZDNet, remarcando que la información sobre estos profundos cambios se enviase tanto en España como EEUU a horas intempestivas.
Las redes sociales ofrecen hoy mucho más que oportunidades de relacionarse entre amigos, encuentros casuales y amorosos. Las redes sociales proliferaron y se especializaron en distintos campos.
Tomemos como ejemplo Linkedin. Hoy es una excelente herramienta para búsqueda de profesionales en el mercado. Bastante útil para el departamento de RRHH y empresas de hunting. También en Facebook se puede identificar fácilmente las comunidades de intereses profesionales y, a partir de ellas, identificar profesionales, consultores especialistas en determinadas cuestiones, etc.
Haciendo foco en el tema de la seguridad de la información, es un hecho que muchas empresas bloquean el acceso a las redes sociales desde sus ambientes corporativos. Los riesgos que justifican tal decisión están asociados a la confidencialidad de la información corporativa y de la productividad de los empleados.
Existe la percepción de que si dejáramos que los empleados accedan libremente a las redes sociales, podríamos comprometer su desempeño al largo del día. Un tiempo atrás, el debate era si se debería o no conceder acceso a internet a los empleados. El hecho es que con el desarrollo y la popularización de los móviles con acceso a internet y las aplicaciones específicas para acceso a las redes sociales, el bloqueo a estas webs en las computadoras de la empresa no impedirá el acceso a los empleados que quieran ingresar a las redes sociales. Seguramente, no será bloqueando el acceso a las webs que se asegurará la productividad de los empleados.
Como sucede con cualquier nueva tecnología, la primera reacción es la de bloquear el acceso a ella hasta que se entiendan los riesgos relacionados y los beneficios inherentes. Se está viviendo esa fase en relación a las redes sociales. Gradualmente, las empresas van a entender los beneficios de utilizar esas herramientas disponibles y crearán mecanismos para minimizar los riesgos, de forma que, en poco tiempo, el acceso será tan natural como es hoy hacer una búsqueda en Google.
El 35% de las personas que utilizan Facebook no cuida convenientemente la seguridad de sus perfiles. Así lo ha desvelado la compañía de seguridad Checkpoint, quien ha realizado una prueba para desentrañar qué nivel de cuidado de sus contraseñas tienen los adeptos a la red social.
La firma creó un perfil falso y envío un enlace a 200 usuarios para simular un ataque de malware de un ciberdelincuente, usando como cebo usó la frase “echa un vistazo a mis últimas fotos”. Según el informe, 71 personas pincharon en el link para acceder al adjunto, acción que, en el caso de haberse tratado de una página con código malicioso real, habría infectado sus equipos con algún software que se hubiera adueñado de sus contraseñas.
El experimento puso de relevancia que el acceso a los perfiles de los usuarios es relativamente sencillo, ya que muchos admiten como amigo a cualquiera aunque sea un absoluto desconocido.
El grado de apertura de algunos perfiles también ha hecho saltar la alarma de Checkpoint. Pese a que la mayoría de las cuentas dispongan de ciertas configuraciones de privacidad dejar abiertos datos como las fechas de nacimiento, correo electrónico o empresa, también supone un peligro. Muchas de estas informaciones son utilizadas habitualmente para verificar la identidad real al acceder a un servicio de correo electrónico, por ejemplo, por lo que, de caer en malas manos, el riesgo es elevado.
Efectivamente, ya existe una clínica que te ayuda a controlar tu adicción a la red social más grande del mundo. ‘‘El objetivo de la clínica es el de contener el malestar de abstinencia de la red y proporcionar asistencia psicológica’‘, explicó el doctor Federico Tonioni.
La susodicha clínica se encuentra en Italia dentro del Policlínico Gemelli de Roma, según nos informa en Informativo de Tecnología. Este centro se dedica exclusivamente a tratar esta patología a unas 20 personas, en su mayor parte hombres y muy jóvenes.
Sin embargo, los fundadores de esta clínica consideran “insuficientes” la capacidad de esta clínica para dar cabida a una creciente oleada de internautas que no saben distinguir entre el mundo virtual de Facebook y la realidad.
El tratamiento de la adicción a Facebook se realiza en tres pasos: un diagnóstico inicial para encontrar la adicción, reuniones sucesivas de detección de la psicopatología del paciente (con posible uso de psicofármacos) y la participación en grupos de rehabilitación que estimulen las relaciones interpersonales reales.
No obstante, este no es el único centro que hay en el mundo que se dedica a curar la adicción de las nuevas tecnologías. En Turín y China existen otros centros de similares característica que se encargan de desengachar a los usuarios de Internet.
Profesor mostró a sus alumnos cómo destrozaría sus notebooks con nitrógeno líquido si navegaban Twitter y Facebook en clases.
Algunos dicen que la mejor manera de mantener a los alumnos atentos es ¡amenazarlos con destruir sus laptops! Así lo hizo este profesor de física en Estados Unidos tras un audaz “˜experimento”™.
Este docente se aburrió de que sus alumnos en la Universidad de Oklahoma no lo tomaran en cuenta en la clase de física, pues estaban más interesados en sus últimas actualizaciones de Twitter y Facebook que en las leyes de Newton.
Ante esta situación, y para impedirles que llevaran los computadores a clases, el docente decidió mostrarles a sus alumnos qué pasaría si los sorprendía nuevamente con las manos en el pajarillo azul o la gran F “¦ ¡ataque de Nitrógeno líquido!
Tal como lees, si pillaba a sus desatentos pupilos en otra cosa que no fuera la fuerza, velocidad y fluido les arrancaría sus laptops, las metería a un cubito con el elemento y luego los haría trizas contra el suelo.
Una nueva amenaza ha aparecido para la red social de Facebook y los más de 300 millones de usuarios deberían estar atentos para evitar pulsar en un botón que acompaña a una sugerente imagen en la que muchos podrían hacer clic.
Como en otros gusanos aparecidos en el pasado, el gancho es una imagen de una chica en paños menores que invita a pulsar sobre un botón para “ver algo caliente“. El mensaje en el que algunos podrían caer es en realidad un enlace a un código malicioso que además se publica en el muro de nuestra cuenta de Facebook si estamos logados.
El gusano se está extendiendo entre numerosos usuarios, y hace uso de un ataque CSFR (Cross-site Request Forgery), que engaña al sistema de Facebook para que éste piense que el mensaje proviene de un muro de Facebook correcto.
Un hacker o un grupo de hackers ha encontrado una puerta trasera en el servicio de grupos de Facebook y ha logrado introducirse en cientos de ellos aprovechando esa vulnerabilidad, que por el momento no ha sido corregida por Facebook.
Los responsables del ataque han incluido una explicación de la vulnerabilidad en su sitio web, indicando que cuando el administrador de un grupo deja la charla cualquiera puede registrarse como nuevo administrador, así que con una sencilla búsqueda en Google se pueden encontrar grupos susceptibles de ser vulnerables.
Así pues, el hacker “de sombrero blanco” ha indicado a Facebook cuál es el problema, con el cual uno puede convertirse fácilmente en administrador de un grupo de usuarios de Facebook e irrumpir en la charla o hacer lo que crea conveniente en ese grupo. Habrá que ver cuánto tarda Facebook en reaccionar.
Google lanzó hoy la versión beta (de prueba) de su nuevo servicio Social Search, una herramienta que permite rastrear en Internet las novedades y aportaciones de nuestros contactos en redes sociales o blogs.
Google Social Search, actualmente solo disponible en versión experimental, permite encontrar información publicada por nuestro círculo de amistades en redes sociales como Facebook o Twitter.
La herramienta proporciona también entradas en blogs o en cualquier otra web de contenido público.
Para acceder al servicio, es necesario ser usuario de Google. El sistema sólo muestra contenidos de los contactos del usuario en el servicio de correo electrónico Gmail o en aquellas páginas que éste incluya en Google Profile, una herramienta que permite controlar nuestro perfil en Google.
A través de Google Profile, el usuario puede decidir cuáles de sus aportaciones en redes sociales y blogs estarán disponibles para búsqueda.
Marissa Mayer, vicepresidenta de búsquedas de Google, adelantó los detalles de este servicio en la conferencia Web 2.0 de San Francisco la pasada semana. “Creo que demuestra nuestro compromiso con la innovación en búsquedas“, dijo Mayer.
Google ha insistido en que este nuevo producto es totalmente independiente del acuerdo anunciado también la semana pasada con Twitter para ofrecer mensajes de este servicio de microblogging entre los resultados de sus búsquedas.