En esta oportunidad quisiera aportar en el contenido de este blog tecnológico con un pequeño artículo, que si bien no trata directamente el tema de la tecnología, sigue la línea del desarrollo de las pymes.

Las que siguen, son algunas ideas inspiradas en un artículo de la psicóloga Pilar Sordo escrito para El Mercurio, en diciembre del año 2008. Texto en el que se incentiva a los empresarios a pensar positivo y ocuparse de sus negocios.

Una de las claves del éxito profesional y personal consiste en la alegría y felicidad de trabajar en un proyecto propio. Eso sí, lo importante es que eso se demuestre y se transmita. La psicóloga sentencia, “Los empresarios deben dejar huella, si no lo hacen no sirven”.

Lo realmente trascendental es que los empresarios demuestren que les gusta lo que hacen, que trabajen con gusto y por sobre todo, transmitan su experiencia positiva. Y en este aspecto surge un mensaje que es necesario recalcar: “tienen la responsabilidad de contagiar lo bueno de emprender”.

También agregó:

“Creo que nadie podría dudar que las pymes son la estructura laboral que más trabajo le dan a la clase media de nuestro país, y que por lo tanto merecen ser reconocidas y atendidas continuamente, sobre todo en estos momentos de crisis económica”

“Tampoco podemos desconocer que estamos en Chile, y si hay algo que sabemos hacer bien es anticipar desgracias y hacer que el que tenga un sueño, lo anule con la “cuota de realidad” que el otro tiene para decirle “no va a resultar”. Es como si nos gustara tirar los sueños abajo para estar todos con el desánimo habitual con el que caminamos por las calles. Por eso cuesta encontrar muchos emprendedores en Chile”.

Para Pilar Sordo, tener una pyme es mucho más que tener una pequeña o mediana empresa. Es tener un sueño. Sostiene también que las pymes tienen encarnado en su misión y en su visión algo que ella repite hasta el cansancio, y es que uno vino a esta tierra a tres cosas: aprender a amar, dejar huella y ser felices.

En su relato expresa que este tipo de organización empresarial debiera ser más reconocida. No sólo por generar recursos y fuentes importantes de empleos, sino porque son el reflejo social de la resiliencia, del como lo que no te mata te hace necesariamente más fuerte. Son el reflejo de que los sueños son posibles y que se puede trabajar por ellos y con ellos.

Asimismo, la psicóloga agrega:

“Ojalá haya muchas personas creando pymes, pero creándolas con alegría, para que puedan dejar huella en otros que también las quieran seguir. En Chile hace falta gente feliz trabajando…”

“Soñemos con muchas pymes, soñemos con alegría, soñemos que se puede, siempre hay algo que se puede hacer para construir un país más humano y más solidario, que crea todos los días con más fuerza en el emprendimiento”.

Daniela I. Castro Ulloa

Trabajadora Social

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